No 1919 se creó la Caja Central de Creto Marítimo con el objetivo de dotar económicamente las necesidades detectadas en el sector del mar. En 1930 surge el Instituto Social de la Mariña, como iniciativa gobernativa para dar respuesta a un sector profesional necesitado de organización, cuidados y atención para progresar conforme evoluciona el tiempo.

El año 1924 es básico para entender el desarrollo económico y social de Carreira y Aguiño y del ayuntamiento de Ribeira, que llevan a convertir este puerto en el primero de bajura de la Unión Europea.

La evolución del puerto aguiñense vivió momentos de una grande efervescencia pesquera, creándose la lonja, la ampliación de los muelles, la construcción de una fábrica de hielo, un edificio para uso de las redeiras y la regeneración de espacios para el desarrollo de las actividades administrativas de esta entidad de semidereito público apoyada por las administraciones, tanto del estado, como de la propia Comunidad Autónoma.

Las artes del palangre, cerco, trasmallos, miños, así como la práctica del marisqueo la flote, tanto en sus concesiones del Castro y de la isla de Sálvora provocan la creación de asociaciones vivas dentro de la estructura de la propia cofradía, volviendo al origen de la creación de los pósitos que nacieron con esa
vocación de asociacionismo. Así, en nuestra institución está integrada la Asociación de Armadores del Cerco de Aguiño-Ribeira y la Agrupación de Mariscadores.

En la actualidad en la lonja de Aguiño se cotizan cerca de 50 toneladas de percebe a lo que se le debe añadir las capturas de almeja, navaja y erizo, convirtiéndola en una referencia regional y también estatal. La pertenencia del Archipiélago de Sálvora, que forma parte del Parque Nacional
Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia, la esta organización lleva la que se trate de poner en marcha una reserva marina con la intención de optimizar el control de las capturas en la zona de cara a alcanzar un desarrollo biológico sostenible, tanto de las aguas, como de las especies que en ellas habitan.

El espíritu asociacionista es, pues, una faceta indisoluble de la constitución de las cofradías, instituciones sin parangón en la Unión Europea. Las especificidades propias de las cofradías, sin modelo equivalente en la actividad organizativa pesquería de los puertos europeos y sin un
reconocimiento de su estructura dentro de la propia Administración Europea, ejemplifica el valor de ser organizaciones democráticas en las que las voces de los marineros y armadores se escuchan en igualdad de condiciones.

Para entender mejor estas organizaciones y para celebrar un centenario cargado de simbolismo, el cabildo decidió organizar este seminario con el objetivo de estudiar el momento actual por lo que están pasando las cofradías y ver las perspectivas de futuro donde el respeto por la biodiversidad y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ODS, marcarán la ruta a seguir en los oficios del mar.

Ciprián Rivas Fernández
Director